Estamos a pocas semanas de volver a vivir el Black Friday (Viernes Negro, como se le conoce en muchos países de habla hispana), la festividad de consumo más esperada por los compradores de todo el mundo. La misma llega a buena parte del mundo a finales del mes de noviembre, un día después del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos.
Aunque esta nació en el coloso norteamericano, la realidad es que ya se ha expandido por todo el mundo, llegando a Latinoamérica (incluyendo a la Argentina), Europa, y buena parte de África, Asia y Oceanía.
Sin embargo, no solo se trata de una fecha para dejarnos llevar por los mejores precios de descuento que las empresas locales e internacionales tengan para ofrecer, sino de unos cuantos días en los que tendremos que tomar decisiones que pueden afectar la forma en la que compraremos los regalos de navidad.
- Black Friday y las compras navideñas
- Ofertas del Black Friday vs Ofertas navideñas
- El “peligro” del Black Friday
Black Friday y las compras navideñas
Lo que debemos tener en cuenta durante el Black Friday (y los días previos a esta festividad) es que la temporada de descuento se da apenas una veintena de días antes que la navidad, es decir, es posible que en el tiempo que existe entre ambas festividades no sea suficiente para realizar dos tandas de compras completamente separadas.
Aunque muchos suelen ver el Black Friday como una festividad individualista, al contrario de la navidad que suele verse como una grupal, la realidad es que la mejor opción no será comprar productos para nosotros mismos, sino realizar compras anticipadas que complementen lo que podamos adquirir para las semanas subsecuentes.
Es por eso que como compradores tendremos que plantearnos una pregunta: ¿cuando realizaremos nuestras compras, durante el Black Friday o durante la navidad?
Ofertas del Black Friday vs Ofertas navideñas
Sin embargo, si bien es cierto que ambas son festividades para incentivar el consumo, ¿por qué habríamos de elegir una por encima de la otra? La respuesta se presenta desde dos frentes: el primero es que los precios descuento de la temporada navideña son mucho menos agresivos que los del Black Friday, haciendo que los precios sean efectivamente menos competitivos.
En segundo lugar, la demanda suele ser mucho más alta durante el Black Friday, por lo que la oferta también lo es como forma de generar equilibrio. Es mucho más probable encontrar los mejores productos a precio de descuento durante el Black Friday que durante la navidad, ya que marcas y empresas de todo el mundo le dan mayor prioridad a la festividad de noviembre.
Es necesario recordar que el Black Friday es seguido por una festividad un poco más moderna conocida como Cyber Monday (Ciber Lunes) que, aún más que su predecesora, busca incentivar la compra y venta de productos a través de Internet. Esto significa que en los días siguientes al Black Friday tenemos la posibilidad de encontrar descuentos aún mayores en algunas tiendas virtuales.
El “peligro” del Black Friday
A pesar de todo esto, como lo mencionamos anteriormente, es necesario planificar de forma profunda antes de dejarnos llevar por los precios de descuento del Black Friday, ya que en muchas ocasiones realizaremos gastos mucho mayores a los que nuestras finanzas pueden permitir, haciendo que no tengamos suficiente presupuesto para las compras navideñas.
Las compras desesperadas (debido a la corta duración del Black Friday) son el mayor “peligro” que se vive durante esta festividad, por lo que los compradores deben estar conscientes del manejo del presupuesto, realizando no solo compras anticipadas durante esta temporada, sino también investigando los mejores precios a través de las plataformas que tienen a su alcance.
Aquí también debemos tener en cuenta al Cyber Monday que, a pesar de no contar con ofertas tan variadas (y atractivas) como las del Black Friday, puede tentarnos aún más a sobrepasar nuestro presupuesto.
Si bien es cierto que el Black Friday es una festividad creada con la intención de ayudar a las personas a encontrar precios de descuento, la realidad es que también tiene el objetivo de hacernos gastar de más. Es por eso que debemos planificar bien nuestras compras de temporada para no sobrepasar nuestro presupuesto, y complementar todas las temporadas de descuento entre sí.
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